Collar ajustable elaborado con Cilindros y cuentas de Citrino, Piedra Luna, Kunzita, Amatista, Turmalina Negra y Cuarzo Rosa. La base de la pieza esta confeccionada con piel, mientras que el entramado se ha hilado cuidadosamente con resistente nailon de triple hebra. Gracias a su nudo corredizo, el collar ofrece un rango de ajuste que va desde los 36 hasta los 68 cm, permitiendo adaptarse a multiples estilos y preferencias de uso.
PROPIEDADES METAFÍSICAS
🌞 Citrino: Abundancia, Alegría, Manifestación, Claridad Mental, Prosperidad / Chakras: Plexo Solar (3.º), Sacro (2.º) / Elementos: Fuego, Aire
El Citrino, con su resplandor dorado que captura la esencia misma del sol del mediodía en un cristal de cuarzo teñido por trazas de hierro oxidado, deriva su nombre del latín "citrus" y el francés "citron" en alusión al color del limón maduro que caracteriza sus ejemplares más puros.
Venerado desde la antigua Roma donde los comerciantes lo portaban como amuleto para atraer ventas prósperas y los guerreros lo escondían en sus vestimentas creyendo que los volvía inmunes al veneno de serpiente, este cuarzo dorado fue redescubierto en su esplendor durante el siglo XVIII en las vastas minas de Minas Gerais, Brasil, donde aún hoy se extraen los ejemplares más codiciados junto a los yacimientos de Madagascar y Zambia.
Conocido como la "Piedra del Comerciante" por su legendaria capacidad de atraer riqueza y oportunidades, el Citrino ha tejido su mitología como el cristal que no acumula energía negativa sino que la transmuta constantemente en luz dorada, manteniendo su vibración perpetuamente elevada sin necesidad de limpieza frecuente.
Profundamente conectado con el Chakra del Plexo Solar, el Citrino actúa como un sol interno que enciende la voluntad personal y la confianza, disolviendo miedos paralizantes mientras infunde esa determinación inquebrantable de quien sabe que puede manifestar sus sueños en realidad tangible. Su resonancia con el Chakra Sacro despierta la creatividad dormida y la alegría espontánea, liberando bloqueos que impiden el flujo natural de la abundancia en todas sus formas.
Como manifestación del elemento Fuego, porta la chispa transformadora que convierte intenciones en acciones concretas, mientras su conexión con el elemento Aire aporta la claridad mental necesaria para tomar decisiones acertadas y comunicar ideas con brillantez solar.
Durante la meditación, sostener un Citrino sobre el plexo solar induce un estado de empoderamiento sereno donde emergen soluciones creativas y se fortalece la conexión con el poder personal ilimitado.
Como escudo protector único, su vibración dorada crea un campo áurico que no solo repele la negatividad sino que la transforma en optimismo contagioso, siendo especialmente valorado por terapeutas y sanadores que lo utilizan para mantener sus espacios energéticamente limpios.
En prácticas de sanación holística se emplea para activar el metabolismo, mejorar la digestión y revitalizar el sistema cuando la fatiga crónica nubla el entusiasmo natural, actuando como catalizador que despierta la vitalidad solar inherente en cada célula.
El Citrino nos enseña que, como el sol que cada mañana renace sin guardar rencor por la noche anterior, nosotros también podemos elegir irradiar luz propia independientemente de las sombras externas, recordándonos que la verdadera abundancia no es solo material sino la capacidad de mantener encendida la llama de la alegría y compartir generosamente nuestro brillo con un mundo que necesita más portadores de luz solar cristalizada.
🌙 Piedra Luna: Intuición, Equilibrio Emocional, Energía Femenina, Protección Nocturna, Amor / Chakras: Corazón (4.º), Tercer Ojo (6.º), Corona (7.º) / Elementos: Agua, Aire
La Piedra Luna, con su misterioso brillo interno blanco-azulado que se desplaza bajo la superficie como luz lunar reflejada en aguas tranquilas, es una variedad de feldespato conocida como adularia cuyo nombre deriva tanto del Monte Adula en los Alpes suizos donde fue redescubierta, como del sánscrito "Chandrakanta mani" que significa "joya de la luz de luna".
Los antiguos romanos creían firmemente que esta gema era producto de rayos lunares solidificados, mientras que en la India se cuenta que se forma absorbiendo la luz de cada luna llena hasta quedar impregnada de su esencia sagrada.
Profundamente conectada con el Chakra del Corazón, la Piedra Luna despierta el amor sincero y la compasión, actuando como bálsamo emocional que disuelve viejas heridas afectivas y permite abrirse a nuevas experiencias del alma con la confianza de quien camina bajo la protección lunar. Su resonancia con el Tercer Ojo activa la intuición dormida y los dones psíquicos latentes, facilitando visiones clarividentes y sueños proféticos que revelan verdades ocultas en las sombras del inconsciente. Al vibrar con el Chakra Corona, establece un puente directo con lo divino femenino, permitiendo que la sabiduría celestial descienda como suave rocío lunar sobre la consciencia despierta.
Como manifestación del elemento Agua, fluye con las mareas emocionales armonizándolas sin represión, mientras su conexión sutil con el elemento Aire aporta claridad mental para comunicar las percepciones intuitivas recibidas.
Durante la meditación, contemplar su adularescencia induce estados de receptividad profunda donde emergen memorias olvidadas y se revelan los ciclos internos que gobiernan nuestra naturaleza emocional.
Como escudo protector nocturno, ha sido llevada por viajeros desde tiempos antiguos para garantizar travesías seguras bajo el manto estrellado, creando una burbuja de luz lunar que ahuyenta peligros y pesadillas.
En prácticas holísticas se emplea para equilibrar ciclos hormonales femeninos, fortalecer la fertilidad y acompañar procesos de transformación emocional con la suavidad de las fases lunares.
La Piedra Luna nos enseña que, como la luna que crece y mengua sin perder su esencia, podemos atravesar todos los ciclos emocionales manteniendo nuestra luz interior intacta, recordándonos que la verdadera magia reside en honrar tanto nuestras sombras como nuestra luminosidad, pues ambas son necesarias para brillar con autenticidad en la danza eterna entre la tierra y el cielo.
💞 Kunzita: Amor, Paz, Autocompasión, Perdón, Elevación / Chakras: Corazón (4.º), Tercer Ojo (6.º), Corona (7.º) / Elementos: Agua, Aire
La Kunzita, con sus delicados tonos que fluyen del rosa pálido al violeta etéreo, es un silicato de litio y aluminio descubierto en 1902 en las pegmatitas de California, donde el gemólogo George Frederick Kunz reconoció en ella no solo una nueva variedad de espodumena sino un puente cristalino hacia el amor más puro.
Conocida poéticamente como la "Piedra del Atardecer" por su tendencia a palidecer bajo el sol directo, prefiriendo mostrar su esplendor rosado bajo la luz suave de la luna y las estrellas, esta gema moderna ha tejido rápidamente su propia mitología como guardiana del corazón herido y mensajera del amor incondicional. Su singularidad radica en que, tras ser expuesta a luz ultravioleta, emite un resplandor naranja rosado en la oscuridad, como si guardara en su interior la última caricia de luz antes de sumergirse en la noche del alma para iluminarla desde dentro.
Profundamente conectada con el Chakra del Corazón, la Kunzita actúa como bálsamo cristalino que disuelve las corazas emocionales construidas por dolores antiguos, permitiendo que el amor fluya nuevamente como río. Su influencia se extiende hacia el Tercer Ojo y la Corona, creando un puente de luz rosa que une el amor terrenal con la compasión divina, facilitando la comprensión de que todo dolor es temporal pero el amor es eterno.
Como manifestación del elemento Agua, fluye suavemente por las grietas del corazón roto llevándose consigo penas estancadas, mientras su conexión con el elemento Aire eleva la conciencia hacia perspectivas más amplias donde el perdón se vuelve posible.
Durante la meditación, sostenerla sobre el pecho induce un estado de rendición amorosa donde las defensas emocionales se ablandan y emerge la vulnerabilidad sagrada que permite tanto dar como recibir amor sin condiciones.
Como escudo protector de vibración elevada, envuelve al portador en un campo áurico de amor incondicional que transmuta automáticamente cualquier energía discordante en compasión, siendo especialmente valorada para proteger el corazón sensible sin cerrarlo al mundo.
En prácticas de autocompasión, la Kunzita actúa como espejo amoroso que refleja nuestra luz interior cuando la autocrítica nubla la visión, recordándonos que merecemos el mismo amor que tan libremente damos a otros.
La Kunzita nos enseña que, como ella misma que debe protegerse del sol excesivo para mantener su color, el corazón sensible no es debilidad sino don precioso que requiere cuidado consciente, invitándonos a honrar nuestra naturaleza emocional como portal hacia el amor universal, recordándonos que cuando aprendemos a amarnos con la misma ternura con que amaríamos a un niño herido, nos convertimos en faros de compasión que iluminan no solo nuestro camino sino el de todos aquellos que cruzan nuestra senda.
✦ AMATISTA
1. Nodo: 6º Chakra (Tercer Ojo) + 7º Chakra (Corona)
→ Portal de transmutación y visión simbólica en el eje superior
2. Giro: Aire + Éter
→ Movimiento espiralado ascendente, expansivo. Dissuelve densidad mental en percepción sutil.
3. Geometría: Llama Violeta Helicoidal
→ Espiral que asciende desde el entrecejo hacia el campo no-local. Vórtice de clarificación mental-emocional.
4. Constante: π – 1 ≈ 2.141
→ Valor de trascendencia. Vector que separa la forma del exceso, manteniendo coherencia estructural.
5. Funcionalidad:
Disipa el ruido mental y emocional, eleva la percepción simbólica, abre el campo intuitivo. Ideal para prácticas de meditación, contemplación, sueño lúcido o trabajo de transmutación interior.
6. Carga de Sombra:
Disociación espiritual, fuga hacia lo sutil como escape del cuerpo o del conflicto encarnado. Puede llevar a una “sabiduría sin presencia”.
7. Reintegración:
• Hematita (anclaje denso y estructurante)
• Larimar (suavidad emocional en el descenso)
• Cuarzo Ahumado (retorno consciente al cuerpo)
• Respiración espiral ascendente (inhalar desde entrecejo hasta coronilla, exhalar hacia la base en espiral suave)
• Práctica: meditación de visión simbólica o sueño lúcido con intención clara
• Visualización: llama violeta helicoidal que asciende desde la frente, transmutando lo denso en percepción sutil
⚫ Turmalina Negra: Protección Absoluta, Transmutación, Arraigo, Fortaleza, Escudo Energético / Chakras: Raíz (1.º) / Elementos: Tierra, Éter
La Turmalina Negra, con su oscuridad profunda atravesada por estrías longitudinales que recorren el cristal como antiguos códigos de protección grabados en piedra, es un ciclosilicato de boro y hierro conocido mineralógicamente como chorlo, el miembro más abundante de la familia de las turmalinas.
Su nombre deriva del cingalés "turamali" que significa "piedra de colores mezclados", ironía del destino para este miembro de la familia que eligió vestirse únicamente de negro, aunque los comerciantes holandeses del siglo XVIII la llamaban "imán de Ceilán" al descubrir asombrados cómo estos cristales atraían la ceniza caliente de sus pipas mediante sus propiedades eléctricas.
Formada en las profundidades de pegmatitas graníticas donde el boro y el hierro danzan en fluidos magmáticos durante millones de años, la Turmalina Negra ha sido venerada desde tiempos egipcios como guardiana contra las fuerzas oscuras, mientras que los alquimistas medievales la consideraban capaz de transmutar energías al igual que su legendaria Piedra Filosofal.
Profundamente conectada con el Chakra Raíz, la Turmalina Negra establece el anclaje energético más poderoso conocido en el reino mineral, creando raíces invisibles que penetran hasta el núcleo terrestre y devuelven al portador esa seguridad primordial de estar firmemente plantado en la realidad física mientras permanece protegido de toda influencia nociva.
Como manifestación del elemento Tierra, proporciona la estabilidad inquebrantable de la roca madre, mientras que su conexión sutil con el elemento Éter le permite actuar como puente entre los planos físico y energético, transmutando las frecuencias densas en vibraciones neutras que se disipan sin causar daño.
Durante la meditación, sostener una Turmalina Negra crea un campo de protección impenetrable que permite explorar los territorios más profundos de la psique sin temor a interferencias externas, actuando como centinela que vigila mientras el alma viaja.
Como escudo protector sin igual, no solo repele energías negativas sino que las absorbe y transmuta instantáneamente a través de sus propiedades piezoeléctricas únicas, convirtiendo la negatividad en carga neutra que se descarga hacia la tierra.
En prácticas de limpieza energética, se pasa por el aura para "barrer" cualquier residuo o entidad adherida, mientras que colocada en las esquinas de una habitación crea una matriz protectora que bloquea incluso las radiaciones electromagnéticas modernas.
La Turmalina Negra nos enseña que, como este cristal que absorbe y transmuta sin destruirse, la verdadera protección no consiste en levantar muros sino en desarrollar la capacidad de transformar lo negativo en neutro, recordándonos que el escudo más poderoso es aquel que convierte las flechas en polvo antes de que puedan tocarnos.
💗 Cuarzo Rosa: Ternura, Calma, Autoamor, Perdón, Presencia, Respirar / Chakras: 4º Corazón / Elementos: Agua, Tierra
Un resplandor rosa se asienta en el pecho; la pieza refresca como agua quieta.
Te ayuda a suavizar emociones y a hablarte con ternura en el momento presente.
El cuarzo rosa nace en rocas profundas; su brillo suave guarda historias. Según tradición griega, la unión de Afrodita y Adonis lo hizo símbolo de amor. Según relatos egipcios, se emplearon piedras rosadas en rituales de belleza; en prácticas chinas contemporáneas inspira masajes que aquietan la mente. Por eso es la piedra del amor: recordatorio sencillo de perdón y compasión en lo cotidiano.
Afín al Elemento Agua, acompaña el 4º chakra (Corazón) con pulso sereno. Su tono lechoso y su frescor invitan a bajar el ritmo y escucharte. Si esta pieza te elige, úsala en comienzos, reconciliaciones o como gesto de cuidado para alguien que atraviesa cambios. Para preservar su color, evita sol intenso y guárdala a la sombra.
- Micro‑práctica (2–4 min): coloca la pieza sobre el corazón; respira 5‑5 (inhala 5, exhala 5) por 18 ciclos; al exhalar repite “yo soy amor”.
- Antes de dormir: apoya la pieza en la mano sobre el pecho; nombra tres gratitudes y suelta hombros.
- Pausa laboral: sostén la pieza 60 s; relaja mandíbula, mira un punto quieto y respira 3 veces profundo.
- Paseo consciente: camina 5 min atento; cada 10 pasos, toca la pieza y elige amabilidad.
Combínalo con:
Rodonita — acompaña el perdón y relaciones conscientes.
Prehnita — favorece escucha interior y calma del corazón.
Cuarzo ahumado — enraiza y sostiene límites amables.
Sodalita — aporta claridad mental y comunicación serena.
Malaquita — impulsa transformación emocional con valentía.
"Respiro ternura y elijo amarme hoy."
Nuestros productos están elaborados con la más alta calidad y acabado, sin embargo su duración y mantenimiento depende del uso y cuidado que les proporciones. A continuación te compartimos algunas recomendaciones de uso y cuidado:
- No utilizarlos mientras te bañas y evita el contacto con todo tipo de químicos. (Ejemplo: perfume, loción, blanqueadores, hairspray, maquillaje, jabón, etc.)
- No introducirlos a la alberca, mar, spa o vapor.
- Evita la humedad, calor o exposición al sol.
- Límpialos con un paño suave y cuando no los uses, guárdalos en un lugar fresco y seco.
- Las piedras que utilizamos son naturales, por lo que su color, tamaño y/o forma, pueden variar.