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Pulsera elástica hecha con cuentas de 8 mm.
Propiedades Metafísicas
🌋 Piedra Volcánica: Transformación, Enraizamiento, Fuerza Interior, Protección, Renacimiento / Chakras: Raíz (1.º), Plexo Solar (3.º) / Elementos: Fuego, Tierra
La Piedra Volcánica, con su superficie plagada de poros como pequeños portales que guardan el aliento primordial de la Tierra, es una roca ígnea nacida del encuentro violento entre el magma ardiente y el aire frío.
Conocida desde tiempos remotos cuando las primeras civilizaciones interpretaron las erupciones como manifestaciones de fuerzas divinas, esta piedra porosa negra fue venerada como fragmento solidificado del poder creador y destructor que late en el corazón del planeta. En el México prehispánico el basalto se convirtió en lienzo donde los antiguos tallaron su cosmovisión, como atestigua la monumental Piedra del Sol azteca. Su nombre deriva del latín "pumex" (espuma) para la variedad más ligera, testimonio de cómo el fuego líquido se transforma en roca que puede flotar sobre las aguas.
Profundamente conectada con el Chakra Raíz, la Piedra Volcánica actúa como ancla telúrica inquebrantable que disipa miedos primordiales y ansiedades flotantes, estableciendo una base sólida desde la cual enfrentar las tormentas de la vida con la misma firmeza de la montaña que resiste erupciones. Su resonancia con el Chakra del Plexo Solar enciende el fuego interior de la voluntad y el coraje personal, transformando la parálisis del miedo en acción determinada y ayudando a forjar la propia realidad con la fuerza implacable del magma que moldea paisajes.
Como manifestación de la dualidad Fuego-Tierra, encarna el misterio de la transformación: el fuego líquido que se vuelve piedra sólida, la destrucción que crea nueva tierra, recordándonos que todo final violento puede ser el nacimiento de algo más fuerte.
Durante la meditación, sostenerla induce un estado de presencia absoluta donde el calor primordial de su origen ígneo calienta el alma mientras su peso terrestre ancla el espíritu, creando equilibrio perfecto entre la pasión que impulsa y la estabilidad que sostiene.
Como escudo protector de absorción constante, sus incontables poros actúan como esponjas energéticas que capturan y neutralizan las vibraciones densas del entorno, siendo especialmente valorada como guardiana que transmuta la negatividad en fuerza interior renovada.
En prácticas de sanación holística se emplea como difusor natural de aceites esenciales, aprovechando su estructura porosa que absorbe y libera lentamente las esencias, convirtiendo cada cuenta de lava en un talismán aromático personal que combina el poder transformador de la piedra con las propiedades específicas del aceite elegido, mientras facilita procesos de renacimiento personal y fortalece la resiliencia ante las adversidades.
La Piedra Volcánica nos enseña que, como el magma que debe destruir para crear, a veces necesitamos permitir que nuestras estructuras obsoletas se derrumben en fuego purificador para que de las cenizas emerja una versión más auténtica y poderosa de nosotros mismos, recordándonos que portar el fuego de la transformación y la solidez de la montaña nos convierte en fuerzas imparables de la naturaleza capaces de renacer tantas veces como sea necesario.
- Usa una cinta métrica o, si no tienes una, un hilo, listón o tira de papel.
- Rodea la parte más angosta de tu muñeca, ajustando el material a ras de piel (sin apretar ni dejarlo suelto).
- Si usaste hilo, listón o papel, marca el punto donde se encuentra el extremo y mide esa longitud con una regla.
- Según tu preferencia de ajuste:
- Ajuste justo: Agrega 0.5 cm a la medida de tu muñeca.
- Ajuste normal: Agrega 1 cm a la medida de tu muñeca.
Ahora ya tienes la medida perfecta para elegir la talla de tu pulsera. Las tallas van de 13 a 20 cm, aumentando de 1 cm en 1 cm.
Nuestros productos están elaborados con la más alta calidad y acabado, sin embargo su duración y mantenimiento depende del uso y cuidado que les proporciones. A continuación te compartimos algunas recomendaciones de uso y cuidado:
- No utilizarlos mientras te bañas y evita el contacto con todo tipo de químicos. (Ejemplo: perfume, loción, blanqueadores, hairspray, maquillaje, jabón, etc.)
- No introducirlos a la alberca, mar, spa o vapor.
- Evita la humedad, calor o exposición al sol.
- Límpialos con un paño suave y cuando no los uses, guárdalos en un lugar fresco y seco.
- Las piedras que utilizamos son naturales, por lo que su color, tamaño y/o forma, pueden variar.